Las comunidades de Temascalcingo guardan muchas de nuestras más antiguas tradiciones, por eso la importancia de convivir y poder aprender de cada una de ellas para evitar que se pierdan; una de las que más se está perdiendo o que muchas ya no la practican es la forma en que se va a pedir a las imágenes de otra comunidad para que participen de las festividades de el santo patrono de la iglesia; en este caso estuve presente en la petición de El Puente a la Iglesia de La Magdalena; invitación extendida al Señor Salvador y a Maria Magdalena para asistir el día 12 de Diciembre. La comunidad Otomí de la Magdalena recibe entonces el día de hoy a la comunidad hermana de El Puente, por esto en la iglesia no es día común, desde temprano ya se encuentran las mujeres y hombres encargados de la Iglesia realizando los preparativos necesarios para esta celebración. Los Fiscales, Mayordomos, Cargueros y familias en general se dividen responsabilidades para que esto sea un éxito; agradezco mucho a todos los encargados de la Iglesia de La Magdalena Centro y de El Puente por permitirme ser parte de esta festividad, una de las cuáles se ela ncuentra en peligro de ser olvidada, pero que comunidades hermanas como Andaró, Maró, El Puente, La Huerta y Magdalena se encuentran tratando de rescatar.
Los preparativos no se toman a la ligera, darle un recibimiento adecuado a los integrantes de la otra comunidad es la prioridad, para así poder estrechar los lazos entre comunidades y a través de esto conservar las tradiciones de los abuelos; mientras algunos acarrean las bebidas, otros se encuentran cocinando en grandes ollas carne con chile verde y frijoles, no pueden faltar los grandes chiquihuites con tortillas de maíz rosado; la gente se encuentra contenta, arreglan la iglesia con muchas flores y los santitos se visten con sus mejores galas. En la sacristía un grupo de mujeres se encuentra preparando los estandartes, también se encuentran colocando flores en las palanganas, todas en pequeños ramos amarrados para poder obsequiar a las palanganas de la comunidad vecina a la hora de ser recibida. Todo parece estar en su lugar, la comida se encuentra caliente y lista para ser servida, las flores y arreglos se encuentran esplendorosos, las imágenes están más que listas para escuchar las peticiones de los fieles y lo más importante, los Mayordomos están preparados para recibir a sus invitados.
A lo lejos se empiezan a oír los cohetes tronar, la comunidad de El Puente se encuentra cerca ya de la Iglesia de La Magdalena, las mujeres entran a la sacristía y comienzan a tomar las palanganas, los estandartes y el copal. Se agrupan frente al altar y forman dos filas, se despiden por un momento de sus imágenes y salen de espaldas de la iglesia; los cantos, la música de violín y de tambor se escuchan también mezclados con cantos y el olor a copal; las campanas dan aviso de la procesión que se esta preparando en el exterior, todos estos elementos acompañan a los mayordomos de ambas iglesia en su visita a los oratorios o altares ubicados en las esquinas del atrio. En la entrada de la iglesia se agrupa ya un pequeño número de personas con ofrendas en mano, es la comunidad que trae consigo la petición. Se reúnen ambas comunidades y se comienza a darle entrada a los invitados. Se persigna con el humo del copal los estandartes que porta la comunidad, cada una de las personas con cargo en la iglesia lo realiza, mientras que la música y los cantos no paran de sonar. Después se procede a colocar flores en cada ofrenda que se trae para sellar el lazo de hermandad entre estas dos comunidades, así las palanganas quedan vacías y se procede a realizar un recorrido por las 4 esquinas de la Iglesia; posteriormente, entre cánticos se entra a la iglesia de rodillas hasta estar frente al altar.
Ahora los mayordomos, fiscales y cargueros salen de la sacristía y comienzan a bendecir las palanganas, los estandartes y las ofrendas, primero uno por uno se acerca a los miembros de el puente, y posteriormente en el altar levantan a los 4 puntos cardinales cada uno de los objetos que se van a utilizar. Los cantos y el olor a copal son intensos en este punto, cada miembro se coordina para llevar a cabo esto como la tradición manda. Después de un tiempo se prepara dentro de la sacristía una ofrenda que los miembros de El Puente trajeron para las imágenes, atole y semitas son colocadas de manera cuidadosa en platos, al igual que naranjas y flores. Se procede a presentarlas frente al altar para después, y con mucho cuidado, colocarlas a los pies de todas la imágenes de la iglesia. Se toman los estandartes y palanganas de la comunidad de El Puente, los cánticos cesan y un mayordomo toma la palabra, invita a los hombres de la comunidad a pasar a la sacristía, y a las mujeres a esperar con las mujeres de la comunidad en las mesas que se encuentran preparadas para el convivió.
Dentro de la sacristía hablan primero los representantes de El Puente, se alegran de el recibimiento que tuvieron y saludan uno por uno a todos los amigos de La Magdalena. Los miembros de El Puente invitan a todos los miembros de la comunidad de La Magdalena a participar de su festividad de la patrona de la comunidad, La Virgen de Guadalupe, y especialmente a dos miembros de su iglesia, el Señor Salvador y María Magdalena; ambos grupos coinciden en la importancia de respetar y honrar las tradiciones que sus abuelos y padres realizaban, por lo cuál esta petición es de mucho valor para ambos, tanto por la invitación recibida, como la aceptación de la misma. Ambos grupos se ponen de acuerdo sobre los pormenores de la festividad y de la petición. Al finalizar se reza y se aplaude en nombre de los miembros de las comunidades y de las imágenes religiosas que están visitando. Posteriormente se les invita a no retirarse para formar parte de un convivio que ha sido preparado por los anfitriones y sus familias. La tarde pasa y finalmente se entregan los estandartes y palanganas a la comunidad de El Puente, quién se retira a su comunidad para poder continuar con los preparativos de su fiesta y muy probablemente, invitar a más iglesias hermanas. Son estas tradiciones las que se han ido perdiendo, y como resultado también lo han hecho los lazos de hermandad entre las comunidades del municipio.
Comentarios
Publicar un comentario